El Instituto de la Mujer ha realizado el estudio “Formación profesional de las mujeres y nuevos yacimientos de empleo” con el fin de analizar la ocupación de mujeres y hombres en seis sectores económicos con potencial de crecimiento. Esta investigación se ha llevado a cabo durante los años 2011 y 2012, y se ha analizado el periodo 2008-2011, valorando cómo ha incidido la crisis económica en cada uno de ellos.
Los sectores seleccionados para el estudio han sido: Servicios TIC y Economía verde, claramente masculinizados; Audiovisual e Investigación, con una presencia equivalente de mujeres y hombres, y Turismo y Servicios a personas mayores, fuertemente feminizados.
El presente estudio muestra cómo, ante la oportunidad laboral que para las mujeres suponen los yacimientos de empleo analizados, en ellos se está reproduciendo la segregación por sexos que está presente en el conjunto del mercado laboral, tanto horizontal (existencia de sectores masculinizados y feminizados) como vertical (menor presencia de mujeres en los puestos directivos). Por ello, es necesario promover la igualdad en estos sectores, para que esta oportunidad lo sea efectivamente no sólo para el empleo, sino también para avanzar en la igualdad en el mercado laboral.
PRINCIPALES RESULTADOS
Durante el periodo analizado, 2008-2011, la crisis ha tenido una incidencia desigual en cada sector, y ha afectado en distinta medida a hombres y mujeres en cada uno de ellos.
En Economía verde y Servicios a mayores la tasa de empleo ha crecido: 11’1 % y 5’9 % respectivamente, sin embargo en el primero el incremento ha sido mayor para las mujeres (19’5 %) que para los hombres (9’5 %). Por el contrario, en el segundo, el empleo masculino se ha incrementado en un 34’7 % y el femenino solo en un 3’5 %.
En los otros cuatro sectores incluidos en el estudio se ha producido una pérdida de empleo, en distinto grado: Reducida en los Servicios TIC (- 1’4 %), Investigación (- 2’1 %) y Turismo (- 2’8 %), y mayor en el de Audiovisual (- 14’3 %). A pesar de esa reducción, este último sector se considera de potencial crecimiento en relación con su desarrollo en la Unión Europea, donde proporciona un 48% más de puestos de trabajo que en España.
Por sexos, las diferencias también son significativas: En el sector de Servicios TIC la ocupación femenina desciende un 3’2%, mientras que la masculina aumenta un 3’9%. En Audiovisual e Investigación se produce la situación contraria: en el primero la pérdida de empleo representa el 20’2% para los hombres y solo el 2’7% para las mujeres. En el segundo supone una caída del 9’5 % para los hombres y un incremento del 9’5 % para las mujeres.
Sector Servicios TIC: Sector con mayor representación femenina en puestos de dirección
Su potencialidad se basa, fundamentalmente, en su transversalidad en el conjunto de la economía y en que constituye un nicho de empleo de calidad. Sin embargo, la perspectiva es desigual para hombres y mujeres, ya que todo el empleo perdido en este sector ha sido femenino.
Las mujeres no superan el 28% de la ocupación en servicios TIC y solo son mayoría en la categoría de administrativo, mientras que se reduce significativamente su proporción en los puestos técnicos. Sin embargo, es el sector en el que su presencia en puestos de dirección es más alta con respecto al conjunto de la economía: 37 %.
En cuanto a la formación, en los últimos años se ha producido un importante retroceso en la presencia de alumnas que se forman en áreas asociadas al sector, situándose en apenas el 14% en FP y en el 18% en la universidad.
Sector de la Economía verde: Las mujeres superan en cualificación a los hombres.
Este sector, donde se han considerado las actividades de las energías renovables, la gestión de residuos y el tratamiento y gestión de aguas, ha generado empleo con buenas condiciones laborales. Sin embargo, es el más masculinizado: las mujeres solo representan el 17% de la ocupación, aunque tienen mejor cualificación: el 58 % de ellas poseen estudios superiores, frente al 36 % de los hombres.
En el sistema educativo es donde se produce la mayor segregación: para las titulaciones relacionadas con este sector, las mujeres son el 37% del total del alumnado universitario y el 10% en Formación Profesional.
Sector Audiovisual: 64% de alumnado femenino en la universidad y solo 38% de ocupación en el sector
Dentro del sector audiovisual (actividades cinematográficas, de televisión, radio, música y edición de programas informáticos –videojuegos-), las mujeres representan el 38% de la ocupación, pero con importantes variaciones en función de los subsectores, como por ejemplo, en “grabación de sonido y edición musical”, los hombres representan el 80% y en “edición de programas informáticos”, no hay presencia de mujeres.
Estos niveles de participación por sexo contrastan con los de la formación universitaria vinculada, donde las mujeres tienen un importante protagonismo, el 64% del alumnado matriculado, aunque es más acorde en el caso de la Formación Profesional, 40% de alumnas.
La mayor cualificación de las mujeres ocupadas en este sector no se corresponde con la estructura ocupacional: Los hombres se concentran en mayor medida en niveles directivos y técnico-profesionales, mientras que las mujeres lo hacen en otras cualificaciones de menor rango.
Sector de la Investigación (Biotecnología): El mayor equilibrio de ocupación por sexos, con 47 % de mujeres
Dentro de este sector se ha considerado específicamente la biotecnología, en el que la participación por sexos ha resultado ser más equilibrada: 47% de mujeres sobre el total de su ocupación. Este equilibrio se enmarca en un contexto de ligera sobrerrepresentación femenina en las especialidades formativas correspondientes, tanto de Formación Profesional, 56% de mujeres matriculadas, como de la Universidad, un 60%. En concreto, en la carrera universitaria de Biotecnología, casi el 70% del alumnado matriculado son mujeres.
Igualmente, las mujeres parecen haber alcanzado cierto equilibrio con respecto a los hombres en los puestos directivos y técnicos cualificados: 45% del total.
Sector del Turismo: Sector muy feminizado con baja representación directiva y técnico-profesional, el 38 %
El turismo es un sector feminizado: Las mujeres representan el 56% de su población ocupada, con porcentajes que rondan el 80% en subsectores como el de las agencias de viajes.
Dentro del sistema educativo, se reitera la sobrerrepresentación de mujeres, que son más del 70% del alumnado matriculado en las carreras de turismo y casi el 65% en los Ciclos Formativos de Grado Superior de Hostelería y Turismo. Solo varía esta proporción en los Ciclos Formativos de Grado Medio, con una participación del 40% de mujeres matriculadas.
Sin embargo, de nuevo, el mayor grado de cualificación entre las mujeres no resulta garantía para su posicionamiento en el sector. Si las mujeres representan el 56% de la ocupación, su participación desciende al 38% en los puestos directivos y técnico-profesionales.
Sector Servicios a Personas Mayores: Mayor potencial de crecimiento con empleo casi exclusivamente femenino
Los servicios a personas mayores es uno de los mayores yacimientos de empleo. En este sector se han tenido en cuenta tanto las actividades asociadas a su vertiente formal (residencias, servicios de teleasistencia, ayuda a domicilio, etc.), como la calificada de “informal”, es decir el servicio doméstico, ya que un importante porcentaje de la atención a mayores es prestada por personas del servicio doméstico. De hecho, el empleo doméstico hace triplicar las cifras de ocupación en el sector.
A la inequívoca potencialidad de creación de empleo del sector se une su feminización. El 90% de las personas ocupadas en él son mujeres, porcentaje que apenas se reduce si se considera de manera aislada el sector formal, un 81%.
La infrarrepresentación de los hombres en la ocupación es similar en el sistema educativo, aunque en este caso la relación formación-ocupación no es tan directa, al producirse demanda mayoritaria de empleo no cualificado y al no existir ramas educativas especializadas en el nivel universitario. La presencia de mujeres entre el alumnado matriculado en las especialidades universitarias roza el 76 %, mientras que en las de Formación Profesional alcanza el 85 %.
Las mujeres son una amplia mayoría en las categorías directivas y personal técnico-profesional, un 86 % pero, aun así, de nuevo, existe segregación vertical, en la medida en que esta representación está por debajo de la media en el conjunto del sector, que es del 91 %.
CONCLUSIONES
La investigación muestra una gran heterogeneidad en los yacimientos de empleo seleccionados, aunque con rasgos comunes que manifiestan la necesidad de aplicar medidas para promover la igualdad de género, con el fin de evitar que las oportunidades de ocupación reproduzcan o agraven la segregación por sexos que caracteriza el actual mercado de trabajo. Es necesario impulsar tanto la incorporación de mujeres en profesiones masculinizadas, como la de hombres en las feminizadas.
Igualmente, es imprescindible reducir la segregación en las distintas categorías profesionales. De hecho, la posición de las mujeres en puestos de decisión, dentro de estos sectores de oportunidad, supone una estrategia clave no solo en la medida en que establece equilibrios de género, sino también por el efecto multiplicador que conlleva para la atracción de más mujeres hacia dichos sectores.
En la metodología utilizada para la realización de este estudio se ha recurrido a fuentes estadísticas, se han realizado entrevistas a agentes sectoriales y a mujeres ocupadas en los yacimientos, además de acceder a información sobre la situación de empleo en estos sectores, los perfiles profesionales demandados y la calidad del empleo generado.
Fuente: http://www.inmujer.gob.es/