El Gobierno de Navarra y la empresa checa Advanced Materials-JTJ colaborarán en la investigación y el desarrollo de nuevas aplicaciones industriales de la nanopartícula de óxido de titanio en el sector sanitario, medioambiental o del transporte, entre otros, lo que podría suponer una inversión por parte de la compañía de 4.250.000 euros para la fabricación anual de 5.000.000 litros del producto y la creación de 100 puestos de trabajo, si los resultados de las pruebas que se practiquen fueran satisfactorios.
En la actualidad, la firma checa desarrolla en la Comunidad foral dos proyectos de investigación basados en la aplicación de productos que contienen la citada nanopartícula: uno con la sociedad pública NILSA, para la depuración de aguas residuales, y otro con el Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias (INTIA), para su uso como sustitutivos de fitosanitarios habituales en viñedos. En ambos casos, los resultados se conocerán antes de finales de 2014.
La empresa «Advances Materials JTJ» se dedica a la investigación, desarrollo e innovación sobre nanopartículas y su aplicación práctica y cuenta con una patente internacional por la que es propietaria industrial de los productos FN1, FN2 y FN3, basados en nanopartículas de óxido de titanio.
Investigaciones en marcha en Nilsa e INTIA
La firma checa suscribió el año pasado sendos contratos de investigación con las sociedades públicas del Gobierno de Navarra, “Navarra de Infraestructuras Locales, S.A,” (NILSA) e “Instituto de Tecnologías e Infraestructuras Agrarias, S.A.” (INTIA), ambas adscritas al Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local.
En el caso de NILSA, el proyecto de investigación está enfocado como tratamiento final en la depuración de aguas residuales. Tras cinco meses de pruebas en las instalaciones de Tudela, Monteagudo y Valtierra-Arguedas, la aplicación de este agente se hará extensiva a las plantas situadas en la cuenca de los ríos Alhama (Cintruénigo, Corella y Fitero) y Huecha (Cortes). La utilización de dióxido de titanio mejora la microbiología del agua depurada porque elimina patógenos como las bacterias Escherichia Coli y Salmonella, así como sustancias derivadas del cloro, restos de medicamentos para humanos y animales (especialmente antibióticos), restos de pesticidas y plaguicidas, y ciertos disyuntores endocrinos (hormonas).
En cuanto al proyecto suscrito con INTIA, iniciado recientemente, está basado en la aplicación de productos que cuentan con nanopartículas de óxido de titanio como sustitutivos de fitosanitarios habituales en viñedos. Se espera contar con resultados contrastables en el próximo mes de octubre. Adicionalmente, se están analizando las posibilidades de la aplicación de los productos en el ámbito de la sanidad animal. (navarra)